viernes, 3 de junio de 2011

Llega la caballería

Tras la gala, las cosas se han normalizado en casa. Bueno, excepto para Pe y Barbie, quienes están llevando "a su manera" el regreso de Tommy. En el caso de Pe, se pasa el día y buena parte de la noche sentada en el sofá, viendo películas antiguas, leyendo revistas de moda y sobresaltándose cada vez que suena el timbre. Lo de Barbie es aún peor. Lleva varios días encerrada en el dormitorio, que está en plena fase de reforma, escuchando discos de baladas a toda pastilla y achicando mis escasas reservas alcohólicas. Además, el artículo de la revista Gossip Queens parece haberle afectado bastante, y anda obsesionada con el hecho de que una periodista desconocida esté hurgando en su pasado. Piensa que hay micrófonos y cámaras instalados por toda la casa, y que el chico que trae el pan es en realidad un espía de la prensa rosa.

Por su parte, el causante de todo esto no se ha atrevido a asomar la nariz por la casa, aunque cada día sin falta envía un ramo de rosas blancas para Barbie. Sin embargo, ésta no duda en devolverlo sin molestarse en echarle un vistazo (una lástima, porque quedarían monísimos en mi salón). Así que hoy, cuando sonó el timbre, supuse que de nuevo sería el mensajero con el correspondiente ramo. Cual sería mi sorpresa cuando ante mí apareció una chica cuya exótica belleza y elegancia me dejaron literalmente con la boca abierta.

-¿Vive aquí Barbie? -preguntó en correcto castellano, pero con un acento que me sonó a árabe.

Asentí repetidamente, hipnotizada por aquellos ojos almendrados y oscuros.

-Me llamo Leilah -dijo tendiéndome la mano-. Soy la mejor amiga de Barbie. ¿Está en casa?

-La primera a la derecha-respondí con un hilo de voz, señalando las escaleras, y dispuesta a seguirla dondequiera que fuese.

Leilah subió corriendo y abrió la puerta del dormitorio sin llamar.

-¡Dios mío, Babs! ¡Dime que eso que llevas puesto no es un chándal!

Obviamente, Barbie no podía decirlo. Se removió en la cama, frotándose los hinchados ojos.

-¿Leilah? ¿De verdad eres tú? -gimió.

-Vine en cuanto me enteré, y creo que he llegado justo a tiempo. ¡Estás hecha unos zorros! Por favor, si hasta llevas zapatillas, ¿no te da vergüenza? ¡No puedes seguir así! ¡Te lo prohíbo terminantemente! Ahora mismo vas a meterte en la ducha, te arreglas, salimos a que nos de el aire y charlamos. Ah, y mañana sesión de manicura, pedicura, limpieza de cutis y masaje. Todo se solucionará, no te preocupes.

-Oh Lei, ¡cómo te he echado de menos! Tú siempre sabes qué hacer. Te quedarás aquí a vivir conmigo, ¿verdad? No es el Four Seasons, pero no te faltará de nada... De hecho, hasta que llegó Tommy me divertía bastante.

Me sorprendí cruzando los dedos para que la bella desconocida se quedase en casa.

-¡Por supuesto! Además he traído mi equipaje. Cuando veas los modelitos que compré en Montecarlo te vas a caer de espaldas. ¿A qué esperas? ¡Arriba!

Maravillada, observé como Baabi se levantaba de la cama de un salto y se dirigía al baño tarareando una canción.

-Oye Leilah, no te conozco pero gracias. Todos estábamos preocupados por ella.

-No es nada. Barbie es como mi hermana. Hemos trabajado y vivido juntas durante muchos años, y estuve ahí cuando... bueno, cuando ocurrió lo de Tommy. ¿Te lo ha contado, no?

-Oh, sí, claro que... no. No hay forma. Creo que ni aunque le hiciera el tercer grado diría una sola palabra.

-No te preocupes. Cuando esté preparada, lo hará. No te importa que me quede aquí, ¿verdad? Al menos temporalmente.

-Puedes quedarte el tiempo que quieras. Las amigas de Barbie son siempre bienvenidas en esta casa.

Dejé a mi nueva inquilina en el dormitorio de Barbie, y bajé al salón, donde Pe estaba viendo Rebelde sin Causa por tercera vez en una semana.

-Leilah va a quedarse ¿no? -me soltó, sin separar la vista de la pantalla.

-¿La conoces?

-Por supuesto. Estudió con nosotras en el instituto. Es la mejor amiga de mi prima y aunque tiende a ser demasiado protectora y permisiva con ella, es buena persona, generosa y compasiva, aunque algo obsesionada con la moda. Hasta que se retiró, fue considerada como una de las mejores modelos del mundo. Hace poco publicaron un reportaje sobre ella, déjame mirar...

Pe revolvió el montón de revistas del suelo, hasta encontrar la que buscaba y me la tendió. Según el artículo, Leilah es israelí de origen sefardí. Habla inglés, francés, español e italiano, y durante años ostentó el título de "Best Model". Aunque tiene su residencia en Montecarlo, suele viajar por todo el mundo debido a su reciente nombramiento como Embajadora de buena voluntad de las Naciones Unidas. Además, se confiesa fanática de la Fórmula 1 y los spas. Aunque lo mejor del artículo fue la cantidad de fotografías que incluía...








La verdad es que tal y como están las cosas esta chica ha venido como un regalo caído del cielo. Bueno, en realidad ha venido como un regalo de mi marido, a quien aprovecho para dar las gracias desde aquí, él sí que me ha caído del cielo. Y a ver si de una vez me entero de lo que ocurrió entre Tommy y Barbie y os lo cuento...

10 comentarios:

  1. ¡Bienvenida Leilah! ¡Quién tuviera una amiga como tu para sobrellevar los momentos difíciles! Esta chica tiene una vida interesantísima y menudo estilazo en el vestir, además es todo un bellezón!
    Bss!

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  2. Guauuuuuuuuuu q maravilla es preciosa me encanta!!! bueno a ver si ya nos enmteramos todos de que paso q intriga. Unas fotos preciosas :)

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  3. ¡Atentos a la foto de Barbie tirada en la cama y la copa de Martini al lado vacía! No ha faltado detalle jeje. Me encantan los modelitos de Leilah!

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  4. Gen, tienes razón, es todo un bellezón y tiene un armario que ya lo quisiera yo para mí!

    Rocío, no te preocupes que le terminaré sonsacando la historia a Barbie.

    Chica, te has dado cuenta de lo de la copa eh! Es que lo está pasando muy mal la pobre (y la tonta, que el Tommy tampoco es para tanto).

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  5. Por Dios! Barbie en chándal tirada en la cama! Menos mal que ha llegado Leilah para devolverle el glamour que nunca debió perder! Por cierto, menudo bellezón esta chica!

    Besitos!

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  6. ¡Qué preciosidad es Leilah! ¿Ayudará a Barbie a salir del bache? ¡Nos morimos de curiosidad!

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  7. Qué bueno tu blog, ROssetti. Te he conocido a través de mi amiga Cloti, pero tu blog me ha parecido genial, muy divertido y glamouroso al tiempo. Mis muñecas (nancys y barriguitas) también tienen vida propia (y qué vida!!) y muchas historias que contar.
    Besos
    Rosana

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  8. Moonlight, puedes estar tranquila que Leilah se está encargando que Barbie vuelva a ser la de antes.

    Rosana, bienvenida, me alegro que te guste tu blog, aunque soy más adicta a las Barbies, tengo también Nancy (con un armario setentero lleno de conjuntitos originales) y barriguitas, porque en realidad me encantan todas las muñecas de mi infancia. Nos veremos por tu blog, me encanta cotillear la vida de otras muñes!!

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  9. Cada vez escribes mejor...y por fin hoy puedo tener un rato para leerlo todo de un tiro. Me encanta los pendientes de Lei, le favorecen mucho, y tiene la cara monisima! Los modelitos ni hablar...esperando la proxima entrada!

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  10. Es preciosa, una de mis Barbies favoritas! seguro que ella y Babie tendrán muchas cosas que contarnos.
    Que la disfrutes muchísimo.
    Un besote guapa

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¡Gracias por tu valioso tiempo, y tus aún más valiosas palabras!